martes, 18 de agosto de 2015

15 ¡¡AVERÍA!!

18 de Agosto de 2015, Pemba, Mozambique.

La cerretera era buena, de asfalto, recta y sin baches. Conduzco con cuidado, especialmente cuando atravesamos alguna población, sin embargo antes de entrar en una aldea dejo de acelerar y dejo que la furgo pierda velocidad. A lo lejos veo un hombre que se echa al medio de la calzada. Mal asunto, pensé, seguro que es un policía. Efectivamente, la señal de limite de velocidad marcaba 60 y yo iba a 64 km/h.
-Vaya con mi compañero, él le enseñará el radar con su velocidad marcada- me dice el poli malencarado.
-No necesito verla, me fio de ustedes.
-Tengo que multarle, son 1000 Meticales- unos 20€
Ahí empezó la pelea verbal de siempre. Que si yo soy mayor y voy siempre con cuidado, que sólo me he excedido en 4 Km/h. que sea usted bueno y comprensivo, bla bla bla,,, y el tío que erre que erre, en tono medio agresivo.
En un momento dado digo:
-Bueno, está bien. A ver qué es lo que marca el radar-
Me acerco al otro agente, que estaba pegado al coche patrulla y me enseña la lectura, efectivamente marcaba 64 Km/h. Entonces se me ocurrió decir lo siguiente:
-Vale, ya os habéis salido con la vuestra, ya he visto el radar, ¿contentos?
Entonces, dando por finalizado el asunto, me voy a mi vehículo arranco y hago ademán de irme.
Los policías se quedaron desconcertados.
-Eh, ¿A donde va?-
-Ya he visto el radar. Me voy-
-¡Quieto ahí! -me dice el malo, ya medio sonriendo.- Tenemos mucha sed-
¡Ya te pillé! pensé. Me metí en la furgo y saqué una botella de agua mineral a media vida y se la dí. Me dieron las gracias y nos dejaron seguir sin pagar nada. Nos estuvimos riendo un buen rato.


Porrazo en el columpio

Iglesia levantada hace siglos por los portugueses en Isla de Mozambique




La Isla de Mozambique está unida al continente por un puente de 3 Km.

Siguiente parada en nuestro avance hacia el norte fue en Ilha de Moçambique, antigua capital en los primeros tiempos de los portugueses.

Pasamos otros días más al norte, en Pemba, donde sí apreciamos bastante turismo, algo que no hemos visto en todo el periplo.

AVERÍA

Justo al entrar en la ciudad de Pemba empezamos a oir un ruido en la furgoneta. Tras una rápida inspección vimos que se había partido uno de los muelles de la suspensión, rueda trasera derecha. No me extraña, después de la cantidad, y calidad, de baches que hemos cogido, es lo mínimo que nos podía pasar.
Desmontamos la pieza y nos fuimos Javi y yo a la ciudad, estamos acampados en "Russel Place", un hostal/camping a 4Km. Intentamos buscar una pieza nueva o de segunda mano: fantasía bética. En esta "ciudad" no hay de nada. Optamos por la solución "B": soldadura, es decir, solución provisional porque un muelle soldado dura un telediario; sin embargo a nosotros nos podía funcionar porque "sólo" tendríamos que hacer 3000km hasta Mangola, en el norte de Tanzania.
La reparación la hicieron tres jóvenes que trabajaban en plena calle. La cosa fue durita porque, primero tuvimos que ir a comprar electrodos, después se fue la luz y más tarde se fundió el enchufe de la soldadura. Tres horas para un trabajo de unos 30 minutos. 25€
Muelle extirpado.
Para rematar la mañanita tuvimos numerito a la hora de almorzar. Llegamos a un chirinquito cercano en cuyo cartel figuraban calamares, pescado, pollo y muchas cosas más.
-Sólo hay pollo con arroz-Nos dijo la patrona.
-Ok, un plato de pollo con arroz-Pedimos nosotros.
Debía ser que la paisana no tenía ni pollo ni arroz, porque nos tuvo esperando más de una hora.
Sin embargo la espera fue recompensada con una comida deliciosa. El pollo, a la brasa, estaba espectacular, crujiente por fuera, tierno, bien cocinado por dentro y con un sabor estupendo. Debía haber estado marinado en especias porque el sabor no era normal. El arroz no se quedaba atrás, con pequeños tropezones de zanahoria y de pimiento verde resultó muy sabroso; se podía comer sólo.
A veces pasa. Cuando menos te lo esperas te encuentras con una comida que te alegra la vida.

Os recuerdo que la información práctica de este viaje está en el apartado del mismo nombre en la cabecera del blog. No hay mucho: Visados y Ferry fronterizo. Allí os lo cuento.


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